viernes, 23 de mayo de 2014

¿Sabes cuáles son los maridajes más complicados?



Los platos más difíciles
Ciertos platos son difíciles de combinar con el vino a causa de reacciones químicas entre uno o varios de sus componentes o, más sencillamente, porque los platos tienen un sabor muy fuerte que mata cualquier vino. En la práctica, son muy pocos los vinos que pueden consumirse con los siguientes platos.
Alcachofas

Contienen un componente  químico que afecta el paladar de diferentes individuos, suelen dar al vino un gusto dulce o metálico.
Algunas personas no son sensibles a la cinarina  pero , como las alcachofas suelen servirse con una vinagreta o con salsa holandesa, es preferible servir el vino antes de llevarlas a la mesa, o bien con el siguiente plato.
Chocolate

El cacao contiene taninos semejantes a los del vino, por lo que hace difícil apreciar las virtudes de este. De todos modos, un vino especialmente potente y concentrado, sobre todo si es dulce, puede ofrecer una armonía satisfactoria.
Espárragos, espinacas

Estas verduras contienen un componente químico similar al de la alcachofa que, sin embargo, afecta a menos personas. Conviene utilizarlas con mucho cuidado si ha de servirse una buena botella de vino durante la comida.
Huevos

Como el chocolate, los huevos embotan la lengua y anestesian las papilas gustativas. El souffé de queso en el que las yemas se mezclan con las claras batidas a punto de nieve, es una excepción a la regla que se puede acompañar con los mejores vinos.
Cocinas India, Tailandesa y Mexicana

Son capaces de reducir a la nada una buena botella, porque los picantes anulan el paladar. La bebida más agradable  para extinguir “  el fuego” de estas cocinas es el agua fría o la cerveza, también cuanto más fría mejor. Una bebida láctea india llamada lassi es igualmente uno de los mejores acompañantes pero, si se insiste en beber vino, es mejor elegirlo blanco, meloso y corpulento.
Alimentos ahumados

Son alimentos más difíciles de combinar con un vino porque sus aromas a humo tiende a predominar, aunque se asocian bien con toda una gama de vinos producidos a partir de cepas muy aromáticas, como la gewürztraminer  y la riesling.
Vinagretas

Su acidez suele perturbar el precario equilibrio entre los taninos, el dulzor y la propia acidez de los vinos, excepción hecha de los que tienen una buena astringencia, como los chenins blancs de Loira. Los demás vinos ácidos “como el souvignon entre los blancos o el gamay entre los tintos” pueden resultar menos astringentes si se sirven acompañados de una vinagreta o de una salsa a base de zumo de limón “este último tiene los mismos efectos que el vinagre” . La mejor solución consiste en hacer una vinagreta en la que el vinagre sea reemplazado por un vino blanco seco-


martes, 13 de mayo de 2014

EL MUNDO DEL CORCHO.



LOS DISTINTOS TIPOS DE CORCHOS



Existen muchos tipos de corcho, adaptados a los diferentes vinos. Entre ellos podemos encontrar los de  corcho natural, el colmatado, el  I+I y aglomerado entre otros.

De un diámetro estándar de 24 mm  se comprimen  con una máquina hasta 18,5 mm de diámetro antes de colocarse.
Los corchos de champagne y cava son más anchos (de unos  31 mm) y se comprimen más, ya que deberán resistir  la presión  del gas carbónico.

Corchos largos: las grandes bodegas utilizan corchos de primera calidad para proteger sus vinos destinados a envejecer durante decenas de años, a los grandes reservas se les renueva el corcho cada 25 años.

Corchos cortos: se utilizan para vinos de una vida menos larga.

Corchos de conglomerado: fabricados con fragmentos de alcornoque amalgamados, sirven para los vinos normales y para una parte significativa de los champagne.

Los corchos de champagne y cava: se componen de una parte larga de corcho conglomerado, bajo las que se encolan dos capas de corcho no conglomerado. Solo esta parte inferior entra en contacto con el líquido. El aspecto inicial de estos corchos es idéntico al de los demás: su forma de seta se debe a que solo se comprime la base, ya que no se meten del todo en el cuello de la botella.
Se aguantan con el morrión (sujeción de alambre) y una capsula metálica.

Los corchos marcados: los espumosos españoles llevan en la base unos signos que indican la forma de elaboración: estrella para el método tradicional, rectángulo para el método transfer, circunferencia para el Gharmat y triangulo si es un vino gasificado.
Espero que estas 4 pinceladas sobre el corcho os puedan servir para ir ampliando vuestros conocimientos sobre el infinito mundo del vino.